﴾ Disfrutar del momento ﴿

Los días marcados en el calendario que deben ser “especiales” para nosotros, son sólo obligaciones.
​Por eso, hoy quiero que sea tu día, tu hora, tu minuto. Quizás has perdido mucho; pero has ganado la capacidad de apreciar como tú  sólo podrás hacerlo:  por tus experiencias y por tu forma de amar.

¿Por qué algo que podría ser eterno puede acabar tan rápido?

Es el tiempo. La realidad es que ya brindaste con ese vino que bebiste: ya no existe, desapareció. La verdad es que ya aprovechaste o no esa oportunidad, y alégrate o laméntate según decidiste. Y ahora puedes estar pensando en aquello que te divirtió y te hizo reír tanto, pero sólo lo recuerdas. Si aún puedes sonreír es porque viviste, fuiste consciente de lo que te hizo feliz.
La eternidad sólo depende de nuestra mente, hacer del momento algo inolvidable y especial.

Recordemos el clásico “Carpe Diem”

Cuando dudes de todo lo anterior, recuerda al poeta romano Horacio : Carpe diem, quam minimum credula postero –verso escrito en su Odas, I, 11 y que se traduce como: Aprovecha el día, no confíes en el mañana. Si desde hace siglos nos están avisando de esto, ¿por qué seguimos insistiendo en ser víctimas de nuestro destino?

Tienes un día más para comprobarlo. Espero que me comentes cómo te fue.

¡Hasta pronto!

Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *